Toda la comunidad educativa docente está abocada a la resolución y al debate sobre el salario, cuestión que nunca tuvo un cierre definitivo y que está como una de las prioridades de las nuevas dirigencias ministeriales, tanto nacionales como provinciales. Es mas que sabido la importancia que tiene de un salario adecuado, tranquilizador y merecido para mantener no solo la retribución justa, sino también lo atinente a la salud física y emocional del docente y su repercusión en la calidad educativa, que se manifiesta en el vínculo no solo con el alumno sino también en la tríada familia-docente-alumno, al que están involucradas además las autoridades de la institución educativa.
Un salario satisfactorio, tanta veces postergado afecta y beneficia toda esa interrelación, tan necesaria para potenciar climas positivos áulicos.
Ante todo sería bueno recordar que el propio gobierno porteño tuvo que reconocer que recibió de su antecesor 735 escuelas en pésimo estado, con gran deterioro y que va a ser tema, además del salario de las paritarias. En tanto, el lunes se llevó a cabo una reunión paritaria entre los dirigentes docentes bonaerenses de UDA y Suteba y las autoridades provinciales sobre la salud laboral y a su término sostuvieron que fracasó la negociación por la falta de buena predisposición y aseguraron que de continuar con esa postura peligra el inicio de clases para el 3 de marzo. Por su parte, la titular de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini, lanzó críticas y condicionó la continuidad de las negociaciones paritarias. Además condicionó el debate del aumento salarial para los maestros de la Provincia fijado para la semana próxima, a la «»resolución del problema de las licencias por enfermedades crónicas». En el marco de amenazas de paros nacionales y provinciales que anticiparon diversos sindicatos para el ciclo lectivo entrante, la titular de CTERA Stella Maldonado reiteró que los docentes nacionales reclamarán un piso salarial «no inferior a 24%» del actual, mientras los sindicatos bonaerenses alertaron que esperan una suba «de 30%» en su sueldo inicial de $1.150. La ministra de Educación de Jujuy, María Eugenia Bernal, aseguró que uno de los principales objetivos de este año será «cumplir con los 180 días de clases» en la provincia y «atender los reclamos de los sindicatos docentes». Los gobiernos tienen un plazo fijado para resolver la situación docente ya que en un mes -y en algunos casos en menos- los alumnos deberán volver a las aulas para que pueda cumplirse con el cronograma de los 180 días de clases que fija la ley nacional. En la provincia de Buenos Aires, una crisis del sector docente dejaría sin educación a más de 3 millones de niños y adolescentes, sin contar el otro millón de alumnos que concurre a escuelas privadas. En provincias como Mendoza, Jujuy, Chaco, Entre Ríos y Buenos Aires, las negociaciones entre los gremios y los ministros del área son intensas, a fin de consensuar una postura inicial que luego debatirán en un ámbito federal. En idéntico proceso se encuentran los maestros auto-convocados de Salta y los de todos los niveles educativos de Santiago del Estero, que reclaman aumentos salariales y advierten que si no reciben la mejora antes del inicio del ciclo lectivo 2008 aplicarán medidas de fuerza. La primera reunión paritaria nacional docente finalizó en la tarde del martes cinco de febrero con el compromiso del gobierno y los ministros de Educación de acordar el piso salarial para todo el país, la renovación de la carrera del magisterio y la puesta en marcha de una Comisión Federal que mediará en conflictos entre maestros y las provincias.
Los ministerios de Educación y Trabajo y los cinco sindicatos docentes nacionales que participaron en la primera negociación convinieron volver a reunirse en la cartera laboral el martes 12 a las 18, para continuar el tratamiento del piso salarial y los cambios en la carrera de maestro.
La vice-ministra de Trabajo, Noemí Rial, destacó el «excelente clima» de la reunión tras 20 años que no se sentaban a dialogar, y dijo que los ministros de Educación convinieron «pautas generales para la adecuación de la composición salarial en las distintas jurisdicciones y un cronograma del pago para la deuda del incentivo». Como ven hay una movilización provincial y nacional para intentar lograr un equilibrio entre lo necesario y lo posible. Todo esto estaba previsto y lo hemos anunciado en comentarios anteriores del gran desafío entre las políticas transitadas y educación por venir. Queda abierto el tema para continuar debatiendo, e intentar no llegar a situaciones harto conocidas que perjudiquen a lo más vulnerable de la educación, que es “el alumno”.
LIC ELENA FARAH