Siempre el ser humano basó su progreso en la observación de la Naturaleza. Así fue que sin instrumentos logró en un muy lejano pasado medir la distancia de Tierra/Luna, la circunferencia del globo terráqueo, el movimiento de las estrella, la duración de las horas, estaciones y miles de otros descubrimientos.
Hoy, con la computación, aquellos datos primitivos causan asombro por la aproximación. Y así siempre fueron observando todo y luego hicieron sus deducciones, que resultaron ciertas. No había lápices ni papel pero los conocimientos se fueron pasando de boca en boca.
Con los adelantos que tenemos, solamente nos aislamos del mundo. MP3, MP4, radio y telefonía celular hacen que las personas sean autómatas y caminen por las calles como zombis. Ya nada se observa ni se contempla y menos se escucha. Los ruidos del viento, la lluvia han sido sustituidos por la cumbia y otros ritmos de moda.
Hemos observado que la gente recurre anualmente a las vacaciones a fin de año a fin de tranquilizarse, con baños lacustres o marítimos. Es como la descarga a tierra. Durante el año calzamos zapatillas de suela de goma que nos impide el contacto con la Pacha Mama. Desde antes de caminar se calzan zapatillitas a los bebes. ¿Cómo descargarán las tensiones eléctricas? Así nos aislamos.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Río Cuarto