Muchas veces, al no comprender, nos formulamos preguntas. Una de ellas es ¿Para que crecer? Es referido al país. Según nos cuentan, todo va tan bien que temblamos. No hace mucho tiempo atrás, también sucedió lo mismo. El final trajo la desgracia de la población. Pero no para toda. Los de siempre siguieron mejorando, los otros la sufrieron, como siempre. En aquellos tiempos nos contaban que era como el Imperio de los Mil Años, pero no llego ni a un decenio.
Hoy los índices de todo tipo, tamaño y color son de asombro del mundo. Lo mismo que antes. ¿Terminaremos de la misma forma? Dicen que quienes destrozaron al país, pretenden que lo arreglen en cuatro años. Pero el pueblo que fue el destrozado no dice nada, lo dicen los no investigados.
Por eso decimos ¿para qué crecer? Los de siempre tienen más y mucho más y compran más y mucho más. Lo vemos de día porque de noche, no tenemos luz. Es que las ventas de electrodomésticos subieron a índices de los 80. Ya no transitan autos fabricados antes del 2000, todo nuevo. Ya la gente no se arrastra horas y horas por las rutas, usan el avión. Pero no hay. O faltan radares, o están de paro, o hay demoras, pero la gente desborda los aeropuertos.
Decimos que el argentino esta curtido de todo lo que viene de la política, pero no dejamos de asombrarnos, ¿otra vez el mismo final? ¡Es de no creer!
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Rio Cuarto
21/03/07
Rio Cuarto