Sobre la prioridad de un cambio en la educación. Reflexiones sobre la necesidad de despertar interés en el proceso de aprendizaje, la opinión del médico siquiatra Eduardo Medina Bisiach.
Invariablemente me pregunto, si la divulgación de ideas que uno despliega verbalmente o por escrito caen en “saco roto” después de ser leído o escuchado, o si tiene la suficiente pujanza para motivar el interés para la reflexión, o si sirve solo para afianzar un “mas de lo mismo” no solo en nuestra vida cotidiana, sino también en la interpretación de los acontecimientos que ocurren en el mundo.
No descubro respuestas para mis incertidumbres, o si las hay es tan lenta la evidencia que se pierde la posibilidad de su vigilancia o registro al transcurrir el tiempo.
Poniéndome del lado de los emisores, a veces intuyo que el divulgar o pretender “escuchas activos” a través de la palabra es exiguo, insuficiente, no obstante ser la palabra el medio mas seductor que existe, ya que nace del pensamiento y es acopiada en la memoria. Algunos perversos mentales aplican otros medios de persuasión o coacción como la fuerza (léase Medio Oriente). Nunca corresponden a lo admirable que es una seducción.
Viene a colación esta introducción, por lo que acontece cuando uno asiste a reuniones o asambleas comunitarias en las que, lamentablemente, no ensambla formular mis ideas ante la exhibición de tanto individualismo y egocentrismo, más cuando la discusión es referida a temas no personales sino del bien común, como es en este caso la Ley de Educación. Ningún asistente puede rebatir que el viraje es necesario e imperioso. Sin embargo, en todos los intercambios de ideas que presencié, navega la atmósfera de lo superfluo y poco significativo. Tengo la impresión que se trata de una reforma empujando el “carro de un costado”, ignorando el otro: el educando, el alumno, el joven. Desde esta perspectiva, el intercambio solo se establece cuando alguien se siente acometido, tomando una posición defensiva de su ámbito laboral o de su actividad. No escuché en ninguna reunión o evento, proponer ideas innovadoras o renovadoras de fondo, para el indiscutible cambio que las circunstancias exigen y que presumo el gobierno está empeñado. Lo que se percibe en realidad cuando cada uno expone, salvo excepciones, es que trata de colocarse en posición de lucimiento personal, exponiendo sus ideas tendenciosas e interesadas de acuerdo a lo que mas le conviene en su labor o su función; llámese funcionario político, gremial o laboral.
Es continuo el revelado de situaciones obvias cargadas de escepticismo, que interpreto son aplicadas como fundamento de las fuertes tendencias personales hacia la propensión del “status quo”. Si pudiera el ser humano despojarse de su narcisismo y egolatría, y pasar de lo individual a lo colectivo quizás habría un resquicio de posibilidad de elevar la condición humana.
Se requiere que por debajo, en las baldosas calcáreas pisadas por padres, hijos y maestros, en el que asienta un hojaldre de años de abundante polvo de tiza y papeles que forjaron nuestra identidad educativa, se pueda adosar un clima de enseñanza descontaminada de maestros fastidiosos y de alumnos cautivos.
A veces registro que las remanidas frases que todos recitan de: “empujar para adelante”, “vengo a sumar”, “unidos lograremos nuestras metas”, no hacen mas que convencerme de la conocida sentencia “del dicho al hecho hay un gran trecho”, como si el esfuerzo intelectual fuera en vano, como si mis análisis fueran tomados sin razonamiento ni tregua para pensarlos o reflexionarlos.
Me siento como si yo también“empujara el carro de costado” Se muestra solo una fachada de participación democrática. En el fondo secundan los sermones del educador y no las carencias del discípulo por venir. El alumno. ¡Ausente señorita!.
Por lo menos así lo ve, desde ese punto de vista, un profesional de la salud mental y ciudadano, que percibe hoy las señales educativas que anuncian las serias problemáticas sociales del mañana.
Dr. Eduardo O. Medina Bisiach
Psiquiatra Universitario (UBA) Matrícula Especialista Nº 11375
Master Internacional en Adicciones (USAL y Deusto- España)
03/08/06