La forma de actuar del Estado es motivo de reflexión del ciudadano Juan Bell en este artículo.
Los chorros van a donde hay dinero, jamás roban a los pobres. Es que estos tienen muy poco o casi nada. Pero hay alguien que no le importa si se tiene o no dinero, igual se apoderan del mismo. Quien tiene ese poder y esa forma de actuar, es el Estado. Veamos. Los porcentajes son aproximados.
Un sueldo tiene un descuento de casi el 20% Luego hay que agregarle un 22% de aportes del patrón. De lo que le queda al trabajador tiene que pagar un 21% de IVA sobre todo lo que compra. Pero ahí hay que sumarle un 8% de impuesto provincial más un 5% municipal. ¿Cuánto le queda? Poquito. Siguiendo el ejemplo del de arriba, el comerciante aplica porcentajes altos. Los bancos toman el dinero al 2% anual y cobran 35% ¡Pequeño negocio! Las tarjetas, para no quedarse atrás financian a razón del 65% y más. Entonces, para que el pueblo no los tilden de ladrones, se ponen de acuerdo los comerciantes y financistas, cobrando interés cero y hacen caridad. ¡Qué caritativos! Ni la iglesia hace cosas así. Es que incluyen en el precio de contado, los intereses y eso esta permitido por el Código de Comercio. Es legal.
Todos los concesionarios de servicios públicos como son monopólicos, cobran «a lo bestia» Y entonces se arma la rosca. Parece un perro que quiere morderse la cola y jamás llega a nada. Esto llama a la inflación, pero ¿quién la provoca?
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Río Cuarto
21/06/06