El sindicato de Obras Sanitarias de Río Cuarto se manifestó a favor sobre la aplicación de una tasa especial que afectaría a edificaciones de gran magnitud construidas en la ciudad.
«Creemos que la aplicación de una tasa especial a edificaciones de elevada superficie, es una medida justa, solidaria e inteligente de parte del EMOS», señaló el secretario general del Sindicato de Trabajadores de Obras Sanitarias de Río Cuarto, Roberto Tonaselli, al referirse al proyecto del ente oficial de aplicar una carga tributaria extra a dichas construcciones en el casco urbano riocuartense, con el objeto de financiar parcialmente las obras de ampliación de los servicios de agua y cloacas a las que obligan dichas construcciones.
Tomaselli expresó que «nuestra postura no significa una adhesión obsecuente a la conducción del EMOS, sino que apunta a dos objetivos fundamentales, como lo son la defensa de los intereses de la comunidad en su conjunto y, la preservación de nuestra fuente de trabajo y el mejoramiento de los servicios de Obras Sanitarias».
El dirigente gremial indicó que «asociaciones de empresarios o grupos de inversores levantan enormes edificios, que comercializan con pingües ganancias, pero al mismo tiempo, aumentan diez, veinte, treinta o más veces el consumo de los servicios del EMOS, cuenta que es fácil de sacar porque donde existía una casa de familia, se construyen 20 ó 30 departamentos, que no solo aumentan el consumo normal, sino que por sus características individualmente provocan un crecimiento sensible en el consumo de agua potable y el uso de los desagües cloacales. Y lo grave- dijo el gremialista- es que pretenden que todos los riocuartenses paguemos la ampliación de las redes para que ellos ganen más dinero.»
Abundando sobre el tema, Tomaselli expresó que ante el auge de la construcción de edificios de altura, no solo se está provocando una caída manifiesta en la calidad del servicio que presta EMOS, sino que se pone al sistema en peligro de colapsar, ya que fue diseñado para una ciudad con una densidad poblacional por kilómetro cuadrado mucho más baja».
En cuanto a la incidencia sobre el gremio de Obras Sanitarias, el titular del Sindicato expresó que «no se puede aumentar las tarifas para financiar estas obras, porque se le haría pagar más a la gente para que algunos inversores ganen más dinero.
«Por tal causa, estamos de acuerdo en que se aplique una tasa diferenciada a este tipo de construcciones -que de todos modos no pagaran los inversores sino que se la trasladarán a los compradores de los departamentos- y que cambien su voracidad por las ganancias y sean más solidarios en la distribución de los fondos públicos -enfatizó Tomaselli- con los sectores que aún no disponen de los servicios, al tiempo que posibiliten la consolidación del EMOS como empresa del pueblo y su personal tenga salarios dignos, empleo seguro y una mejor calidad de vida», concluyó el dirigente gremial.