Volvió a ascender a la torre de Leyes Obreras al 400 el sujeto que el martes había amenazado con arrojarse al vacío desde el mismo lugar y tras dos horas de diálogo fue convencido para descender con ayuda de bomberos del cuerpo local. Foto: Juan Pablo Reynoso
Juan Pablo Reynoso (24) , el mismo sujeto que hace dos dias mantuvo en vilo a los vecinos de un amplio sector repitió anoche su maniobra, ascendiendo a la antena de telefonía existente en el lugar y advirtió que se arrojaría si su esposa no se presentaba en el lugar. Javier de Olmos, Jefe del cuerpo activo, informó que fue el propio Reynoso quien dio aviso al cuartel. Una dotación se llegó al lugar é intentó persuadirlo de que descendiera pero el joven se negó a hacerlo. Personas del Centro de Asistencia al Suicida y policías le informaron que era imposible acceder a su pedido ya que su esposa, con quien mantiene desavenencias, se encontraba en Rosario. La inminente tormenta jugó entonces a favor de quienes procuraban hacer descender a Reynoso porque desde abajo le advirtieron que la eventual caída de un rayo podría ocasionarle graves daños é , incluso, la muerte. Ayudado por un rescatista, Reynoso descendió y una vez más fue conducido al hospital para ser atendido é internado.
Cabe destacar que a la misma torre, unas horas antes, otro sujeto identificado como Gabriel Sosa, de 22 años, había intentado una maniobra similar. No pudo hacerlo por la intervención de tres policías que se lo impidieron y a quienes, trabándose en lucha, lesionó levemente. Al parecer, Sosa presentaba un cuadro de severa alteración nerviosa que lo habría llevado al intento de ascender a la torre. En medios policiales hay preocupación por las facilidades que encuentran algunas personas en acceder a los predios donde se levantan estas antenas, y que, aunque constituyan recintos privados, debieran –así lo entienden quienes son llamados a intervenir-tener alguna custodia permanente.