Lo dijo Diego en Río Tercero. “Es preocupante que el hijo de Grondona sea el encargado del futuro del fútbol argentino. No tiene dos pies, tiene dos sandías. Me preocupa», aseveró.
Diego Armando Maradona volvió a cautivar con su presencia y sus declaraciones filosas, tras arribar a Río Tercero, donde jugó un partido amistoso.
Con su lengua filosa agradeció los gestos de cariño y le pegó a los Grondona y al que se le pusiera al frente.
MESSI
“Lio hizo conmigo cinco veces mejor mundial que ahora, lo que pasa que esta vez hizo goles. Leo la rompió en el mundial pasado; ahora no. Y no me vengan con el cuento de que se sacrificó por el equipo”.
MUNDIAL
“Mi equipo jugó bien en el Mundial, el de Sabella solo en la final, y hasta ahí nomás. Vamos a sacarnos la careta. No todos estamos contentos con el subcampeonato”.
MENOTTI
“Ni Sabella ni Russo me gustan… Los mafiosos también quieren hacer olvidar a César Menotti. Nos dio el primer título del Mundo y por combatirlos a ellos no tiene trabajo”.
GRONDONA
“Es preocupante que el hijo de Grondona sea el encargado del futuro del fútbol argentino. No tiene dos pies, tiene dos sandías. Me preocupa”.
RIQUELME
¿Riquelme todavía sigue jugando? Le deseo lo mejor. Hay cosas que no se soportan; si decís que amás algo renunciás a un montón de cosas. Pero si el amor no es amor te vas a otro equipo”.
Unos 300 periodistas cubrieron las alternativas del evento, incluso con enviados de Venezuela y Colombia. Y todo terminó como debería haber finalizado: sin problemas porque la prensa sólo se dedicó a hablar y preguntar sobre fútbol, seguramente habiendo tomado nota de la frase que Diego tiró al llegar a Córdoba: “De boludeces no hablo”, cuando fue consultado por una periodista sobre la relación con Rocío Oliva.
“Volver a este lugar me trae recuerdos de niño”, fue lo primero que dijo Maradona, al referirse a su visita a Embalse con Los Cebollitas en 1973 por los Torneos Evita. Y dijo que le gustaría volver, porque quiere mucho ese lugar; mientras se sumó a la iniciativa del intendente de Río Tercero, Alberto Martino, y la comunidad de decretar a esta ciudad como “Capital de los deportistas argentinos”. Tras las palabras “amorosas”, el genio del fútbol mundial comenzó a disparar.
“Estoy en una etapa de mi vida fabulosa, con mi hijo de un año y cinco meses y mi nieto de cinco años… A ellos les voy a poder contar que yo sí le traje la Copa del Mundo a los argentinos, aunque les duela a los Grondona, entre ellos su hijo que no le sabe pegar a la pelota y le quiere enseñar a los chicos a jugar. Es increíble”, tiró la primera; y continúo: “Tengo que salir a buscar trabajo afuera, porque acá los mafiosos y corruptos me cierran la puerta. Eso sí, la puerta de la gente no la podrán cerrar”. Explosión de aplausos y ovación. “Es muy difícil creerse el ídolo del pueblo. Yo lo que sé es no le meto la mano en los bolsillos a nadie”, afirmó y más aplausos.
Fuente: La Mañana de Córdoba