Se acabó el beneficio: en 72 horas el campo agotó los USD 7.000 millones y vuelven las retenciones
- Telediario Digital
- 24 sept
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La medida había sido anunciada hasta alcanzar ese tope o hasta el 31 de octubre, pero la liquidación récord agotó el beneficio antes de lo previsto. El campo deberá volver a tributar retenciones.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), a través de la Agencia de Recaudación y Control Agroexportador (ARCA), informó este miércoles que quedó alcanzado el cupo de USD 7.000 millones en Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) previsto en el decreto 682/2025. En consecuencia, se dio de baja la posibilidad de registrar nuevas operaciones bajo el esquema de retenciones 0%.
En otras palabras, los exportadores ya no podrán liquidar con la ventaja impositiva y el agro deberá volver a pagar los derechos de exportación.
Una liquidación récord
El beneficio, que regía hasta el 31 de octubre o hasta alcanzar el tope de divisas, expiró en apenas tres días. El mercado registró un volumen inusual de operaciones, especialmente en la jornada del miércoles.
“Re mil voladas las DJVE hoy. Entre soja y sus derivados y maíz anotaron más de 9 millones de toneladas. Entre todos los productos, USD 4.200 millones”, señaló en la red social X el analista Salvador Vitelli. Y recordó que “el 90% de esas divisas se liquida en los 3 días hábiles”.
De acuerdo con Agricultura, hasta primeras horas del miércoles las DJVE se distribuían de la siguiente manera:
4,72 millones de toneladas en subproductos de soja
2,69 millones en soja
905.110 en aceite de soja
1,77 millones en trigo pan
952.500 en maíz
177.981 en aceite de girasol
195.300 en cebada forrajera
21.300 en sorgo
17.500 en subproductos de girasol
512 toneladas en harina de trigo
A su vez, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) informó que entre martes y miércoles se negociaron 1,82 millones de toneladas de soja, 228.150 de maíz y 263.977 de trigo, en línea con la oportunidad de mejores precios.
El mensaje de Bessent y la polémica
La tensión en torno a la medida se potenció por un largo tuit de Scott Bessent, secretario del Tesoro de Estados Unidos, quien al detallar la futura ayuda financiera a la Argentina deslizó una frase que inquietó al agro.
"Estamos trabajando con el gobierno argentino para poner fin a la exención impositiva temporal para los productores de commodities que liquidan divisas", escribió el funcionario.
Esa alusión desató un frenético intercambio de mensajes entre exportadores y entidades rurales, que interpretaron que Washington presiona para acotar todavía más el beneficio impositivo. La lectura fue inmediata: ¿Bessent se refería a terminar antes de tiempo con la exención de retenciones, o simplemente a que no se prorrogue después del 31 de octubre?
El Gobierno argentino intentó enfriar la polémica dejando trascender a referentes del agro que “no habrá cambios en el decreto publicado este lunes”. Pero lo cierto es que la mención del funcionario norteamericano dejó flotando la duda de si la Casa Blanca ve con buenos ojos el esquema de retenciones cero, o si lo considera una concesión excesiva para un sector clave en el ingreso de divisas.
Qué decía el decreto
El Decreto 682/2025 había fijado la alícuota cero para granos y subproductos hasta el 31 de octubre, salvo que antes se alcanzara el cupo de USD 7.000 millones, condición que se cumplió ahora. Posteriormente, el Decreto 685/2025 amplió el beneficio a productos cárnicos.
La normativa alcanzaba a soja, maíz, trigo, girasol, cebada y sorgo, tanto en granos como en derivados industriales: harinas, aceites, pellets, biodiésel, harina de trigo y malta, entre otros.
El balance de la BCR
Desde la entidad rosarina valoraron el alivio que significó la medida para el complejo agroindustrial, en especial para la soja: “Fue la primera vez desde marzo de 2002 que se registraron retenciones cero para soja y sus subproductos”, destacaron.
Sin embargo, advirtieron que el cupo resultó insuficiente frente al volumen de mercadería pendiente de exportación. Según cálculos de la BCR, el valor total de trigo, maíz y el complejo sojero por vender asciende a USD 9.770 millones, bastante por encima del límite fijado por el Gobierno.
Una mirada crítica
El episodio revela la fragilidad de la estrategia económica oficial: por un lado, busca incentivar la liquidación rápida de divisas; por el otro, se expone a quedar condicionado por los mensajes de funcionarios extranjeros y por un cupo que, a todas luces, resultó demasiado bajo.
El desenlace en tiempo récord deja dos certezas: que el campo respondió con fuerza al estímulo de retenciones cero, y que el margen de maniobra del Gobierno es estrecho frente a la necesidad urgente de dólares. La incógnita ahora es si, ante la presión externa y la tensión cambiaria interna, se volverán a abrir mecanismos similares o si la etapa de beneficios impositivos para el agro fue apenas un paréntesis efímero.
