“No es exceso de lluvia, es exceso de abandono”: productores marcharon en Carlos Casares con un tractorazo

Más de 500 vecinos y productores rurales marcharon con tractores y maquinaria pesada hasta la Municipalidad para reclamar caminos transitables, obras hidráulicas y un plan de emergencia ante las inundaciones. Entregaron un petitorio que titularon “No es exceso de lluvia, es exceso de abandono”.

Este lunes, una nutrida caravana de tractores, camiones y retroexcavadoras se concentró en la rotonda de la ruta 5, a la entrada de Carlos Casares, para movilizarse hacia la Municipalidad. Allí, productores rurales y vecinos entregaron un petitorio con entre 569 y 596 firmas electrónicas más siete planillas en papel, exigiendo medidas urgentes frente a la crítica situación que atraviesan las zonas rurales del distrito por las inundaciones.

Los manifestantes llevaron carteles con mensajes directos: “Menos discursos, más caminos. Queremos transitar, no nadar”. La carta entregada al intendente Daniel Stadnik lleva como título “No es exceso de lluvia, es exceso de abandono”, y responsabiliza al municipio por no haber tomado medidas preventivas a tiempo.

El reclamo de los vecinos

Los productores remarcaron que las lluvias agravaron un escenario que ya venía deteriorado por falta de obras y mantenimiento: caminos rurales intransitables, campos anegados, familias aisladas y actividad productiva paralizada. “Reclamamos obras durante la sequía advirtiendo este escenario: no escuchó. No hizo nada. En marzo volvimos a alertarlo y en mayo le dijimos que el riesgo excedía lo productivo. No fuimos oídos. Eso tiene nombre: abandono estatal”, señalaron en el documento.

El petitorio exige la activación inmediata de Defensa Civil, la creación de un Comité de Crisis con protocolo público, obras hidráulicas con auditoría ciudadana, un calendario de acción y un plan de emergencia actualizado.

“No hay más margen para reuniones sin plan. Queremos plazos, obras, controles y resultados. No más palabras: acciones”, concluye la carta.

Pablo Zavala, otro productor, coincidió en que la situación se volvió insostenible: “Venimos con el agua al cuello. Llueve mucho, pero nunca estuvo todo tan mal con los caminos. Es un desastre, no están haciendo nada. No hay caminos, hay chicos que no pueden ir al colegio, maestros que no pueden llegar, productores que no pueden sacar lo poco que cosecharon. Necesitamos una solución, y rápido”.

La movilización, que se realizó de manera pacífica, marcó un fuerte gesto de unidad entre productores y vecinos de la ciudad, quienes reclamaron que el municipio dé respuestas concretas frente a lo que definen como una emergencia humanitaria y productiva.