Ni Una Menos marchó en todo el país tras el triple femicidio de Florencio Varela

Las movilizaciones se replicaron en Córdoba, Buenos Aires y distintas ciudades del país. Dialogamos con Victoria Aguirre, coordinadora del movimiento feminista MuMaLá, quien advirtió que el crimen debe leerse en el marco de la narco-criminalidad y la ausencia del Estado en los territorios.

Un crimen que conmocionó al país : el hallazgo de los cuerpos de Morena Verri (20), Brenda Loreley del Castillo (20) y Lara Morena Gutiérrez (15) en una vivienda de Florencio Varela desató una ola de indignación en todo el país. Las tres jóvenes estaban desaparecidas desde el viernes 19 de septiembre y fueron halladas enterradas en el patio de una casa, tras haber sido brutalmente torturadas y asesinadas.

La investigación apunta a una venganza vinculada al narcotráfico. El crimen habría sido utilizado como un mensaje disciplinador y, según confirmaron las autoridades, fue transmitido en vivo por Instagram para un grupo cerrado de unas 45 personas. Hasta el momento, hay cuatro detenidos, entre ellos un hombre de nacionalidad peruana señalado como integrante de la organización narco.

En diálogo con Telediario Federal, Victoria Aguirre, coordinadora del movimiento feminista MuMaLá, advirtió que este triple femicidio “no puede leerse de manera aislada”.

“Es un crimen de odio, un crimen aleccionador. Un mensaje dentro de un contexto de narco-criminalidad que no se descarta. Estamos hablando de delitos federales, del narcotráfico habilitado en nuestro país”, señaló.

Aguirre recordó que desde MuMaLá vienen denunciando hace más de cinco años la proliferación de femicidios en contextos atravesados por redes criminales.

“El Estado se retiró de los territorios. Nos dejó desprotegidas. Hoy no hay programas de acompañamiento para mujeres que atraviesan violencias de género. Tampoco políticas que enfrenten al narcotráfico en los barrios populares. Todo esto genera un caldo de cultivo donde los narcos terminan ganando terreno”, expresó.

Un reclamo que vuelve a las calles

Aguirre subrayó que el triple femicidio se suma a una lista alarmante:

“Llevamos más de 170 víctimas de femicidios en lo que va del año. Es retroceder diez años, volver al grito de Ni Una Menos que masificó las calles en 2015. Lo que conquistamos con años de lucha hoy se pierde frente al desmantelamiento de las políticas de género y la violencia institucional”, sostuvo.

La referente feminista anticipó que habrá nuevas marchas en los próximos días y convocó a la sociedad a sostener la movilización.

“Las mataron por ser mujeres. Las mataron porque podían hacerlo. No alcanza con penas más duras: necesitamos un Estado presente que investigue, que proteja y que acompañe a las víctimas”, concluyó.

Un debate pendiente

El triple femicidio de Florencio Varela no solo expuso la brutalidad del crimen organizado, sino también las falencias del Estado en la prevención y protección de mujeres y adolescentes. La demora policial en activar la búsqueda de las jóvenes y la violencia con la que fueron asesinadas profundizaron el reclamo social.

En las calles, el grito fue unánime: “Ni Una Menos, vivas nos queremos”.

Movilizaciones en todo el país

El caso generó marchas multitudinarias organizadas por el colectivo Ni Una Menos y otros espacios feministas en distintas provincias. En Córdoba, la Plaza de la Intendencia fue epicentro de la protesta, mientras que en Buenos Aires la convocatoria se concentró en la Plaza de Mayo y en el barrio de Flores, lugar que las jóvenes solían frecuentar.

Las manifestaciones se replicaron en Mar del Plata, Rosario y otras ciudades, donde miles de personas reclamaron justicia y políticas públicas que garanticen la protección de las mujeres y diversidades.

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