Mercedes Brussa, ex presa política y referente de derechos humanos, junto a su hija Solana López, denuncian haber sido víctimas de un violento ataque de odio mientras celebraban un cumpleaños en su casa del barrio Trapalanda. Según relatan, un grupo de vecinos las insultó con agravios machistas y homofóbicos, y luego arrojaron piedras que rompieron los vidrios de su vivienda.
Mercedes Brussa contó:
«Esto se reiteró, pero en forma mucho más violenta. Recibimos agresiones verbales horribles, siempre relacionadas con lo sexual, con machismo, homofobia y violencia hacia la mujer. Ayer cruzaron nuestro jardín para golpear a mi hija y rompieron los vidrios con una violencia que no ha terminado. Tengo 80 años, no gozo de buena salud, pero voy a seguir luchando. Yo no tengo por qué irme de acá: los que se tienen que ir son ellos.»
Su hija, Solana López, advirtió:
«Lo que sucedió ayer fue una acción violenta que terminó en insultos, amenazas sexuales y violencia de género. Estos grupos mafiosos se van apoderando del territorio y articulan un discurso de odio que cada vez crece más en nuestra sociedad.»