Por la crisis, otra zapatería cerró sus puertas en pleno microcentro. Lo confirmaron los propietarios de Jimena, el local ubicado en la Galería del Cine, en cercanías del ingreso por Constitución. El cese definitivo del comercio se produce horas después del anuncio de Batistella, un clásico con 48 años de trayectoria en la ciudad.
Desde el Centro Comercial habían advertido que la situación se extendería a otros comercios a partir de enero, debido a la profunda crisis económica y la caída abrupta de las ventas.
El presidente del CECIS, Pablo Vasquetto, quien asumió un nuevo mandato en la entidad, admitió que habría más cierres de comercios y se profundizaría la conflictividad.
En el país
Según el INDEC, en 2017 se importó un 25,93% más de pares que en 2016, lo que significa 34 millones de pares ingresaron al país. Si se tiene en cuenta los últimos dos años, la importación aumentó más del 50%.
Horacio Moschetto, secretario y coordinador del Departamento de Comercio Exterior de la Cámara de la Industria del Calzado, dijo en abril de este año a Buenos Aires Económico que hay una “alarmante que la caída del mercado interno”, y que el sector venía “creciendo en producción, hasta llegar a 125 millones de pares”, pero que este año la produccón cayó “por debajo de 100 millones y se sigue profundizando”.
CRISIS DE VENTAS
"Estamos atravesando el desierto y el verano va a ser muy duro (…) es un diciembre muy duro"
Alejandro Balassi, propietario de zapatería de Río Cuarto y dirigente del CECIS. En diálogo con @AsisonRadioOK lamentó el cierre de Batistella. pic.twitter.com/eTYaYQgFgZ— Guillermo Geremía (@ggeremiaok) 20 de diciembre de 2018
Cierre de Batistella
Clientes desbordaron el local de Batistella en busca de saldos, tras la confirmación oficial de que el comercio cierra definitivamente después de 48 años de vínculo con la ciudad. De los tres empleados, dos serán despedidos y solo uno será trasladado a otra sucursal.
La crisis económica se profundizó en los últimos tres años y derivó en el peor final. «Es una empresa con 48 años, tiene una amplia clientela que se mantuvo pero ha bajado mucho el ritmo de compras y el cierre es definitivo», lamentó el responsable del local.
Añadió que «desde hace tres años, todo es cada vez peor, los comercios que abren cierran al poco tiempo porque es muy difícil mantenerlos»
«Es difícil»
Las clientas lamentaron el abrupto cierre y resaltaron que «es una mezcla de sensaciones». «Venir en busca de ofertas no resulta muy cómodo porque aquí hay chicos que se quedaran sin trabajo y en estos tiempos es difícil conseguir empleo nuevamente», afirmó una de ellas.