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Economía
Se trata de un fenómeno que viene dándose desde hace un par de años a nivel nacional y que desde hace unos meses impacta en el comercio local. Comerciantes destacan la preferencia por la calidad

La cerveza artesanal es un producto que parece estar en su mejor momento en nuestro país. Desde un aumento en las ventas, hasta lugares especializados que se dedican a crearla para venderla a todo público.

La cerveza artesanal es un producto que ya no solo habita en las «Oktoberfest» sino que se trasladó a las mesas de los cerveceros de todo el país.

En Río Cuarto ya existen dos Pymes que se dedican a jugar en este pujante mercado, desde una suerte de bodega/bar que te permite degustar cualquier variedad de la bebida, hasta una fábrica en crecimiento que hace sus botellas y las vende en los bares locales como un producto único.

En diciembre de 2017, para las fiestas, se llegó a vender cerca de 4000 litros de cerveza artesanal de distintos estilos en bares de la ciudad.

Hoy, en Bariloche, la cerveza artesanal representa casi lo mismo que el chocolate. Lo mismo ocurre en La Plata, otro polo cervecero. Y el fenómeno, ya se nota fuerte en Buenos Aires: donde se abre una cervecería, explota de clientes el mismo día de la inauguración.

Los dueños de bares señalan que hay tanta demanda que la producción de materias primas está en crisis: no hay suficiente cantidad.

 

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