Analizan la suerte del decreto del Ejecutivo que prevé un aumento del 33 por ciento. La oposición sostiene que el porcentaje es menor y rechazan su aprobación. Crece el malestar en el gremio.
A puertas cerradas y en medio del paro de trabajadores municipales, concejales comenzaron a debatir el decreto enviado por el Ejecutivo y que da por cerrada la negociación con una suba del 33 por ciento. En este momento, se encuentran reunidos con representantes del gremio.
Los ediles pueden aprobar ó recharzar el decreto, pero no están habilitados para modificarlo. La propuesta se aprobaría con los votos del oficialismo, aunque el conflicto gremial tiene en vilo la resolución.
El documento firmado por el intendente Juan Jure, el jefe de Gabinete Guillermo Mana y el secretario de Gobierno Guillermo Aón ingresó al parlamento en la mañana del lunes. En el texto, al que accedió Telediario Digital, se señala que el aumento acumulativo es del 33,1 por ciento: 10 por ciento con los haberes de abril, otro 10 por ciento en julio y el 10 por ciento restante en octubre.
“Los aumentos determinados precedentemente serán otorgados en forma acumulativa, siendo el incremento total de un 33,1 por ciento, distribuyéndose cada tramo de la siguente manera: 4 por ciento al básico, dos por ciento al adicional asignación solidaria para refrigerio, dos por ciento al adicional de estímulo por calidad del servicio y asistencia y dos por ciento al adicional estímulo méritos personales. Aquel personal en cuya esclaa salarial no estén contemplados estos adicionales, la totalidad del auemnto se liquidará como un adicional remunerativo”, resalta el texto oficial.
Movilización
Empleados municipales se movilizaron en contra del decreto que firmó el intendente Juan Jure para dar por cerrada la negociación salarial y hubo inconvenientes de tránsito en diferentes puntos de la ciudad.
La medida de fuerza afecta fuertamente en Edecom, áreas de Salud, Economía y el registro Civil. En la mayoría de las dependencias trabajan solo los contratados.
Los trabajadores se concentraron en el gremio y desde allí marcharon por el centro de la ciudad, a pesar de las advertencias del municipio de descontar los días de pago y el presentismo.
Carranza advirtió en la mañana del lunes a los ediles que podrían volver a tomar el parlamento «como lo hicimos en 1994» y calificaron de «dictador» al intendente Juan Jure.
A la protesta del Sindicato de Trabajadores Municipales se suman referentes de ATE que se mantienen en estado de asamblea permanentes y se sumaron a las protestas con cortes.