Se reabrió el diálogo con los vendedores ambulantes pero todavía no hay acuerdo

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Los vendedores obtuvieron su primera victoria en la negociación con el municipio para evitar ser erradicados a un salón de calle Belgrano. El arribo del intendente Juan Jure al lugar de la protesta durante la tarde del domingo y el cambio del interlocutor en el diálogo permitieron que levantaran las carpas que interrumpían el acceso el Palacio de Mójica.

Aunque no hay acuerdo, los vendedores ambulantes lograron ser recibidos esta mañana por el secretario de Desarrollo Humano, Guillermo Aón, el titular de Gamsur, José Lago, y el subsecretario de Gobierno Osvaldo Córdoba.
La reapertura del diálogo sirvió para levantar temporalmente el reclamo y se postergó el tratamiento del proyecto de erradicación en el Concejo Deliberante.
Los vendedores obtuvieron su primera victoria en la negociación con el municipio para evitar ser erradicados a un salón de calle Belgrano.
El arribo del intendente Juan Jure al lugar de la protesta durante la tarde del domingo y el cambio del interlocutor en el diálogo permitieron que levantaran las carpas que interrumpían el acceso el Palacio de Mójica.
Tras dos días de ausencia en el histórico edificio, Jure observó que la profundización del conflicto no encontraba vías de salida y decidió presentarse ante los vendedores para iniciar la búsqueda de un consenso.
El mandatario se reunirá con los manifestantes este martes, luego del viaje que realizó a Córdoba para la firma del convenio por la obra de desagues en Banda Norte.

Tregua

Tras cuatro jornadas de protesta, «Liso» Márquez se desencadenó de portal de ingreso y los ambulantes quitaron las carpas sin ceder a la exigencia de permanecer con sus trabajos en las calles.
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Fuentes municipales aseguraron que «al menos 5» de los vendedores tienen «un derecho adquirido» y hasta cuenta con un carné que el propio municipio les otorgó. Sin embargo, admiten que resultaría «muy difícil» de ejecutar una relocalización parcial.
¿Es lógico entender que la venta en las calles es legal para algunos e ilegal para otros? Allí está un eje clave de la discusión. La creación de una ordenanza que regule definitivamente la actividad no se produjo antes de la decisión de crear «la saladita riocuartense» sino que se intenta impulsar en medio de la intransigencia de los vendedores, quienes están dispuestos a volver a la protesta.

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