La responsable del área, Estela Domínguez, precisó en diálogo con TD Digital que la problemática se incrementa durante los meses de invierno, por el impacto del frío en las viviendas ó asentamientos precarios. «Los vecinos los observan tirados en campos ó en casas precarias y con las bajas temperaturas quedan expuestos en el drama. Se han recibido hasta 10 ó 12 casos semanales», expresó.
Desde el Area de la Tercera Edad del municipio intervienen hasta en 10 casos semanales de ancianos abandonados a la marginalidad en Río Cuarto.
La responsable del área, Estela Domínguez, precisó en diálogo con TD Digital que la problemática se incrementa durante los meses de invierno, por el impacto del frío en las viviendas ó asentamientos precarios.
«Los vecinos los observan tirados en campos ó en casas precarias y con las bajas temperaturas quedan expuestos en el drama. Se han recibido hasta 10 ó 12 casos semanales», expresó.
Domínguez precisó que «cuando las familias no los pueden contener buscamos soluciones entre todos».
«Los hogares sustitutos son una opción de enorme ayuda. Los subsidiamos con alimentos pero la situación afectiva que brindan es clave. Aunque los llevemos de noche ó en días feriados siempre hay una atención. Igualmente, se necesita un gran geriátrico y el Viejo Hospital sería la mejor alternativa», resaltó.
La funcionaria precisó que «hay abuelos con familias constituidas que, sin embargo, no tienen la mínima contención».
«No siempre podemos dar una solución definitiva. En el caso de don Antonio Valle se trabajó por primera vez entre los tres organismos: Pami, Provincia y municipio. El abuelo debería haber estado en una organización del Pami, pero por el desalojo del Hogar el Amparo cubrimos la situación con una solución transitoria», manifestó.
Precisó que el hijo de Valle fue internado «porque padece problemas psiquiátricos y físicos»
Denuncias
Estela Domínguez informó que las deenuncias por el desamparo de los ancianos llegan a través de vecinos ó dirigentes vecinales y barriales.
«Los afectados nunca llegan con el planteo. Son casos de extrema fragilidad. Algunos tienen jubilación pero por el estado de deterioro abandonan el cobro. La situación los ha hecho olvidar de sus propios derechos», admitió.