Ernesto Pérez es casco blanco de la ONU y se encuentra trabajando en aquel país. El día martes, momento en el que ocurrió el terremoto Ernesto se encontraba en Puerto Príncipe, pero ya estaba saliendo del lugar cuando escuchó un fuerte ruido y movimiento.
Desde el 27 de julio se encuentra en el pasís centroamericano. Edgardo Pérez es infante de marina y su funcion es mantener la paz respecto a las situaciones de extrema pobreza que allí se vive.
Ese día había ido a Puerto Principe a buscar mercadería porque estaban en un pueblo cercano y cuando regresaban sintió el fuerte movimiento.
«Se quedó en la calle porque no podían entrar a resguardarse a los edificios ya que éstos se derrumbaban». «Fue algo terrible», enfatizó la esposa del infante Cardozo, Mónica Gionco.
En Haití también se encuentra realizando tareas un enfermero riocuartense, efectivo de la Base Áerea.
Detrás de Edgardo se sucedían las imágenes que jamás podrá borrar de la retina de sus ojos. Detrás de él todo se desvanecía, y delante también. Pero, por cuestiones milagrosas, Edgardo hoy puede contar lo que le ocurrió en aquel día y puede hablar con su familia.