Estudiantes de Exactas enseñarán matemática a presos de la Unidad Penitenciaria Número 6

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Este acuerdo tiene lugar en el marco del convenio de cooperación existente entre el Gobierno de la Provincia de Córdoba y la Universidad Nacional de Río Cuarto y su objetivo es permitir el desarrollo de actividades de apoyo en los procesos de aprendizaje en matemática de internos alumnos que cursan la carrera terciaria Administración de Empresa, que dicta el Instituto Cervantes a distancia.

PRENSA UNRC – La Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de Río Cuarto y el Establecimiento Penitenciario nº 6 firmaron un protocolo de trabajo para que estudiantes de esa unidad académica enseñen matemática a presos que estudian a distancia desde la cárcel.
La rúbrica del documento se concretó en el Decanato de Exactas y estuvo a cargo de la decana Gladys Mori y el alcaide mayor José Gustavo Heredia, director del penal. De la ceremonia tomaron parte además la doctora Rosa Cattana, secretaria académica de la Facultad ; Norma Cáceres, jefa del Área de educación de la cárcel de Río Cuarto, y representantes de los alumnos que vienen llevando a cabo esta actividad solidaria tras las rejas.
Este acuerdo tiene lugar en el marco del convenio de cooperación existente entre el Gobierno de la Provincia de Córdoba y la Universidad Nacional de Río Cuarto y su objetivo es permitir el desarrollo de actividades de apoyo en los procesos de aprendizaje en matemática de internos alumnos que cursan la carrera terciaria Administración de Empresa, que dicta el Instituto Cervantes a distancia.
Gladys Mori se mostró «sumamente satisfecha con el trabajo solidario de los estudiantes». «Colaboran de manera abierta y hermosa», indicó. Y agregó: «Para ellos es toda una experiencia. Hace varios años que estamos tratando de implementar este tipo de proyectos solidarios. Siempre estamos apadrinando a alguna institución, tratando de colaborar, por un lado como una facultad de una universidad pública que somos, y por el otro, porque nos interesa muchísimo formar a nuestros alumnos en los valores de la solidaridad, tratar de que comprendan de que esto que ellos reciben, en el sentido de poder estudiar en forma gratuita es gracias a todos, por lo que es necesario retribuir».
Por otro lado, indicó: «Estamos muy agradecidos de que nos permitan poder llevar a cabo este tipo de proyecto».
También dijo: «Estamos trabajando mucho a nivel de la escuela secundaria, en conjunto con el Ministerio de Educación, para mejorar tanto la escuela media como las habilidades que tienen que tener los estudiantes para venir a la Universidad. Cuesta mucho, sobre todo acercarse a las habilidades que tienen los jóvenes, que son muy distintas a las que tenían hace cinco o diez años. Por ahí, no sólo les cuesta adaptarse a los estudiantes, sino también a los docentes». 
 
«Los alumnos han logrado rendir muy bien sus exámenes»
 
A su turno, el alcaide José Gustavo Heredia sostuvo: «Lo que se resalta de todo esto es que las instituciones deben trabajar de forma mancomunada para lograr cosas. Para nosotros esta es una muy buena experiencia. Es fundamental que la Universidad nos haya dado esta posibilidad, como así también del Instituto Cervantes que nos permite que los internos puedan hacer esa carrera. Nos han ayudado mucho».
Y destacó: «No es lo mismo el ritmo que lleva una persona que ha dejado en algún momento por algunas eventualidades. Y los resultados han sido muy buenos, los alumnos han logrado rendir muy bien sus exámenes, estamos sorprendidos».
A continuación, comentó: «En estos últimos años la institución ha dado un vuelco importante en lo que es la parte educacional y en la capacitación de oficios para la persona que está próxima a salir en libertad».
 
Puerta abierta
 
La decana Gladys Mori remarcó: «Nosotros queremos dejar una puerta abierta. Más allá de este protocolo puntual, estamos dispuestos a colaborar en cualquier otra actividad. Ojalá que esto sea sólo un comienzo. Nos gustaría que fuera algo permanente».
Rosa Cattana agregó: «Es una forma de devolverle a la sociedad todo lo que nos da». Y destacó: «Esta cuestión de la educación en la cárcel es muy importante, es una esperanza de que la gente salga con otra visión, con otra perspectiva sobre el futuro. Y se le puede demostrar que también la universidad pública es una oportunidad para ellos». 
   
Detalles del protocolo
 
En el acuerdo se indica que «estas actividades tendrán las características de clases de apoyo, las que estarán a cargo de los alumnos avanzados de la Facultad , quienes trabajaran en conjunto con el área de Educación de la penitenciaría».
«La penitenciaría se compromete a disponer de un espacio físico dentro del establecimiento y facilitar horarios para el desarrollo de esta actividad y decidirá quiénes son los alumnos que necesiten tomar este tipo de clases». En tanto que «la Facultad , a través de la Secretaría Académica , seleccionará los alumnos que desarrollarán esta actividad, los que tendrán un reconocimiento como ayudantes de transferencia educativa».
Esta actividad estará coordinada por parte de la Facultad , a través de la Secretaría Académica , y por parte de la penitenciaría a través de la jefa del Área de Educación, Norma del Cáceres

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