La democracia es un sistema que nos permite hacer y decir lo que nosotros queramos, siempre y cuando respetemos a los demás. Podemos elegir a los que deseamos nos dirijan y hace ya muchos años que esto no ha sufrido ajustes. No son necesarios grandes cambios como lo buscan ciertos personajes, sino seria hora de sentarse a estudiar una pequeña modificación.
El país tiene la enorme dicha y fortuna de tener un sistema educativo de excelente calidad. Es así que cualquier ciudadano, sin importar su origen, puede diplomarse en una universidad. Muchísima gente, va a aplicar sus conocimientos a otros países. Y triunfan. Esto significa que los más capacitados vuelcan sus ideas en el exterior. Se supone que es la flor y nata de los profesionales.
En el país, cualquier persona, preferentemente sindicalista o de un club político, accede a un cargo de gobierno. Son personas que con gran tesón, llegan a ocupar un puesto directivo. ¿Están capacitados? Para muestra basta un botón y hay varios.
Entonces hagamos una pequeña modificación a la democracia. Dejemos tal cual están las cosas hoy; un Congreso, un Gobierno Central y uno poder Judicial. Agreguemos una cámara integrada solamente por profesionales universitarios, a fin de que juzguen las acciones de los otros tres poderes. Solo veamos a que nos llevaron las decisiones de ciertos políticos; una deuda de 200 mil millones de dólares, inversiones en utopías, acciones regidas contra la ética y desaciertos a montones. Los actos de los 3 poderes actuales, serian evaluadas y sopesadas por los intelectuales. Sino, ¿para qué los creamos? Pongámosle retenciones.
Atentamente
Juan R Bell
92061605