Dra Ingrid Waisman – Médica Pediatra – MP 6508 Mesp 2749
Origen y causas
El nombre del dengue proviene del idioma swahili, lengua africana hablada en varios países de ese continente. El nombre original era “Ki denga pepo”: enfermedad súbita causada por malos espíritus.
De los países africanos y del Asia, el dengue ha pasado a ser parte de las enfermedades emergentes en América Latina. Son muchos los factores responsables de la actual pandemia por virus dengue, entre los que cabe destacar; el crecimiento de la población mundial, el aumento de la migración y la urbanización no planeada que genera viviendas con inadecuados sistemas de almacenamiento de agua. También el uso de cilindros y tanques destapados, la recolección deficiente de desechos sólidos y la intensificación del tránsito internacional de personas y de productos, como las más importantes.
No es cierto, por lo tanto, que el dengue no tiene que ver con la pobreza: son justamente las difíciles condiciones ambientales y socioeconómicas en Latinoamérica las que condicionan brotes de dengue. Además de otras causas, como el calentamiento global, las malas condiciones de vida explican la aparición de miles de enfermos en América Latina y en varias provincias argentinas.
Modo de contagio
El modo de contagio es igual en los niños que en los adultos; el agente transmisor es el mosquito Aedes aegypti, de habito diurno; pica en las primeras horas de la mañana y ultimas de la tarde. El período de incubación (desde la picadura hasta la aparición de los síntomas) varía entre 3 y 7 días.
Por otra parte, las personas enfermas, si son picadas por un mosquito de esa especie, pueden transmitir la enfermedad a través del mosquito. Los enfermos, niños o adultos, transmiten el virus especialmente durante el período febril.
Cómo se manifiesta en los niños
En los lactantes y niños pequeños, la enfermedad puede ser inespecífica o caracterizarse por fiebre entre 1 y 5 días, inflamación faríngea, rinitis y tos ligera.
En la mayoría de los niños mayores se presenta como un cuadro similar a la gripe, con gran decaimiento, caracterizado por comienzo súbito de fiebre, que alcanza con rapidez los 39 o 40º C; suele estar acompañada de cefalea y dolor en los ojos, conjuntivitis, debilidad, dolores de músculos y articulaciones, a veces náuseas y vómitos.
Cabe aclarar que muchos niños pueden haber sido infectados por el virus, y no presentar síntomas de la enfermedad (formas asintomáticas).
El dengue clásico, que es la enfermedad arriba descripta, es una enfermedad benigna y que cura sin mayores problemas en una semana.
El dengue hemorrágico y el Shock por dengue son las formas graves de la enfermedad, se producen cuando una persona que padeció dengue clásico (infección primaria), se infecta por segunda vez con un virus de dengue de un serotipo diferente (infección secundaria) al que le ocasionó el primer cuadro.El dengue hemorrágico incluye los síntomas del dengue clásico, a los que se agregan manifestaciones hemorrágicas y síntomas de shock. Estas son formas graves que requieren internación de los pacientes, muchas veces en unidades de Terapia Intensiva.
Aún en estas formas graves, las chances de curarse sin secuelas son buenas cuando el diagnóstico de la enfermedad se hace precozmente y se realiza el tratamiento indicado.
Son signos de alarma para las formas complicadas de dengue:
Dolor abdominal intenso o sostenido.
Vómitos abundantes y frecuentes.
Descenso brusco de la temperatura.
Irritabilidad, somnolencia o ambos
Tratamiento:
La primera recomendación es ante un cuadro febril agudo, consultar al pediatra. Esto posibilitará un buen diagnóstico y un correcto manejo de la situación.
Existen numerosas líneas de investigación sobre tratamiento del virus. Se han obtenido resultados positivos en modelos experimentales , por lo que existen buenas perspectivas para contar en un futuro no muy lejano con un tratamiento efectivo para combatir las distintas formas clínicas de dengue.
Por ahora no existe tratamiento específico, y solo se aplican medidas de sostén. En el caso de dengue clásico el tratamiento puede ser en la casa, indicando al paciente y su familia que concurra al centro de salud si aparecen los signos de alarma.
Se recomienda el paracetamol para la fiebre, los dolores musculares y la cefalea. No debe darse ni aspirina ni dipirona (ej novalgina) por el riesgo de complicaciones.
También es importante la buena hidratación, es decir ingerir abundante líquido, y el reposo.
Se debe proteger al paciente de las picaduras del mosquito, mientras el paciente se encuentre febril, para evitar la transmisión de la enfermedad.
En el caso de dengue hemorrágico o shock por dengue el tratamiento debe ser con internación.
Prevención
No existe una vacuna contra el dengue, y su implementación es difícil por existir varios serotipos (variantes) del virus.
Al no existir la vacuna, la única forma de controlar la enfermedad es prevenirla, y la mejor medida de prevención es el control del mosquito y sus criaderos, la detección rápida y temprana de los casos mediante la vigilancia de casos febriles, y el aislamiento entomológico (protección de las picaduras) de los pacientes enfermos de dengue mientras se encuentren febriles.
Las tareas de control de mosquito (fumigación, aplicación de larvicidas) deben estar a cargo de organismos municipales o provinciales.
Qué debe hacer la población
Estar informada acerca del modo de transmisión de la enfermedad y de las características del mosquito, y de los métodos de prevención.
Adoptar hábitos y prácticas que reduzcan el riesgo de convivir con los mosquitos, como la recolección de residuos, el manejo adecuado de recipientes con aguas estancadas y conductas de autocuidado, como el uso de mosquiteros en puertas y ventanas y el uso de repelentes.
Consulta precoz al médico en caso de sindrome febril agudo
¿Qué repelentes puedo usar?
En adolescentes y adultos:
Se recomiendan repelentes con más de 20 -30 % de DEET (dietil toluamida) (Off etiqueta verde Fuji– o similares).
Si se utilizan repelentes con concentraciones menores debe repetirse la aplicación cada 2 horas.
En niños:
Menores de 2 años: citronella al 2%. Marcas: Aulo Gelio repelente, Repelente REP (crema o loción).Entre 2 a 12 años: DEET al 7,5%. Marca: Off crema tapita naranja
¿Qué hacer con las piletas?
La lavandina se usa como desinfectante, no como larvicida
En las tipo Pelopincho cambio de agua cada 5 días. Lavar bien las paredes previo al rellenado (restregar)
En las piscinas se recomienda larvicida. El que recomiendan los organismos oficiales es de tipo biológico (BTI). Se consigue larvicida, con las correspondientes instrucciones de manejo, en las químicas que venden productos de limpieza para piletas
LO VERDADERAMENTE IMPORTANTE ES ELIMINAR LOS CRIADEROS DE MOSQUITOS
Enlaces:
https://www.msal.gov.ar/htm/site/pdf/guia-dengue.pdf
https://www.sap.org.ar/index.php?option=com_content&task=view&id=1026&Itemid=437