A dos años del crimen del camionero García el hecho sigue impune

0
Compartir

Video: Nota con el doctor Mariano Torres.

Todas las pistas que se siguen desde la fiscalía de Julio Rivero no tienen elementos de contundencia para avanzar en imputaciones o detenciones. Para el abogado de la familia «se trató de un hecho de robo». Sin embargo, sorprende la brutalidad del tratamiento hacia la víctima, quien no había realizado ninguna carga en la cerealera de General Cabrera antes de ser interceptado por él o los homicidas.

La tarde del jueves 22 de marzo del 2007, Gustavo García, «el chapita», fue visto con vida por última vez mientras aguardaba un cargamento de soja frente a una empresa cerealera de General Cabrera. El trámite se postergó y García se comprometió a cenar en la vivienda de un familiar. Aquella noche nunca llegaría a la cita convenida y tampoco se conocería ningún dato de su paradero.
La búsqueda fue desesperada tras el hallazgo a 40 kilómetros de la localidad de Dalmasio Vélez del acoplado camión Mercedes Benz 1114 en el que se trasladaba.
Durante meses se produjo una investigación infructuosa que intentaba determinar su paradero. Finalmente, el 25 de junio, el cuerpo reducido a un esqueleto fue hallado a pocos metros de la banquina derecha de la ruta 158, a pocos kilómetros de Arroyo Cabral. El estado de descomposición del cadáver atado de pies y manos no impedía determinar que García había sido víctima de un muerte violenta.
Todas las pistas que siguió el fiscal de instrucción Julio Rivero, a cargo de la investigación, no lograron reunir elementos de contundencia para avanzar en imputaciones o detenciones.

«Un robo»

Para el doctor Mariano Torres, abogado de la familia de García, «se trató de un hecho de robo». Sin embargo, sorprende la brutalidad del tratamiento hacia la víctima, quien no había realizado ninguna carga en la cerealera de General Cabrera antes de ser interceptado por él o los homicidas.
«La causa se sigue investigando pero debemos tratar de buscar elementos que nos conduzcan a una pista firme», indicó.
Para Torres, «no hay que buscar sospechas en el entorno porque fue, según creo, un hecho casual y fortuito cuando García se retiraba de la cerealera».
Adelantó que investigan un aporte realizado por un hombre detenido en la Unidad Penitenciaria de la ciudad.  

Commentarios

commentarios

Compartir