«Es por temor a los robos mientras uno está de vacaciones», expresó Víctor Giglhione, propietario de un local de alarmas.
Como consecuencia del conflicto del campo, las ventas habían disminuido durante el 2008, pero en enero comenzaron a repuntar, según los comentarios brindados por el dueño de la casa de seguridad.
«Durante los primeros días de enero se vendió más que en el mes de diciembre», apuntó Giglhione, quien explicó que esta conducta está relacionada con la necesidad de protejer la vivienda en tanto los moradores estén ausentes.
El comerciante manifestó que hace tiempo que colocan alarmas a los diferentes country de la ciudad, principalmente al San Esteban y Golf. «Los ladrones no discriminan a nadie, roban por todos lados y en los country se están realizando diferentes hechos delictivos».
Giglhione destacó que no solo roban en country, sino también en departamentos y en casas de clase media. «Los ladrones ya no seleccionan perfectamente a sus víctimas. Andan por todas partes, según lo manifestado por nuestros clientes que son de diferentes sectores de a ciudad».
Robo en country privado
En la tarde del miércoles se reunieron vecinos del country San Esteban con los propietarios del mismo para dialogar sobre el tormento que pasan en el lugar a raíz de estos robos.
El domingo sufrió un asalto una familia de apellido González, a quienes los delincuentes les habrían llevado 5 mil pesos, 5 mil dólares y gran cantidad de joyas. Como consecuencia de este hecho los propietarios de las viviendas pusieron a disposición del encargado del country, la preocupación por la inseguridad que ya les está golpeando a sus puertas.