El juicio contra los padres acusados de abusar de su hija continuará el 2 de febrero

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La postergación de los alegatos se debió a que la defensa pidió 15 días para presentación de pruebas. Las solicitudes de nulidad se conocerán el día de la condena. En el proceso una pareja está acusada de violar y favorecer la prostitución de su hija, y un remisero que habría participado de los abusos.

Los abogados defensores pidieron 15 días para presentación de pruebas y la Cámara Primera del Crimen resolvió postergar hasta el 2 de febrero la próxima audiencia en el juicio por los abusos a una niña de 11 años en el que está imputados los padres y un hombre que se desempeña como remisero.
Los aberrantes hechos de violación ocurrieron en el 2006 en una vivienda de Huinca Renancó. 
El doctor Félix Nieto, abogado de un remisero de la localidad, otro de los imputados, había cuestionado la realización de la Cámara Gesel al señalar que se realizó antes de que oficializara la acusación a su defendido. El fiscal Alejandro Cabrera explicó al Tribunal que al momento de realizar la testimonial a la víctima «no se conocían sospechas contra el remisero»:
El Tribunal resolverá sobre la solicitud de Nieto el día en que se de a conocer la condena.
Durante el juicio hubo intentos de presión con notas periodísticas a la víctima y hasta la presentación de un cassette de audio donde se escucharía una relación sexual.
La víctima está alojada en un internado y su declaración se conoció a través del análisis de especialistas en la cámara Gesel.
La pericia de los médicos judiciales confirma que hubo abusos sexuales y la Justicia intenta determinar quienes fueron los autores del aberrante hecho.

Violación

Según surge de la investigación del fiscal, en el 2006, un vecino de la localidad del sur provincial llegó a la vivienda donde reside la madre de la menor y con el consentimiento de la mujer ingresó al dormitorio donde se encontraba la víctima. Allí se encerró y, tras una feroz golpiza, sometió sexualmente a la niña provocándole lesiones que fueron corroboradas por el análisis del médico forense Guillermo Mazuchelli.
La adolescente admitió que había sido accedida «desde hace tiempo sin su consentimiento, bajo amenazas por personas de su conocimiento».
La madre, «en reiteradas oportunidades le ofreció a la menor prostituirse si queria tener plata».
El segundo hecho ocurrió el mismo año y tuvo la participación de la madre y su pareja. En una habitación de la vivienda, ambos mantuvieron relaciones frente a su hija y luego comenzaron a golpear a la pequeña.
Del dramático contexto participó la progenitora, quien -según surge de la investigación- «la manoseó y la obligó a tener relaciones con el hombre que la acompañaba».

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