Y la Ley

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Los bancos, además de para sentarse, sirven para prestar dinero a quien no lo necesita. Pero hay otros  que son más importantes y no cobran interés. Son verdaderos bancos para los que tienen problemas serios. Muy serios. Son los bancos de sangre. Están, por suerte, en todo el país y en casi todas las ciudades. Pero ¿cómo funcionan?

Cuando uno necesita el líquido vital para vivir, ellos lo dan, y no lo cobran. Es necesario cuando mas afligidos estamos, salir desesperados a «pechar» amigos, compañeros de trabajo, familiares y cuanta persona nos caiga a mano. A su vez es en el momento en que debemos correr tras las órdenes de internación, discutir con médicos y el sanatorio y firmamos cheques en blanco si nos dicen que debemos hacerlo. Es la vida de un conocido, amigo, pariente o simplemente un humano. Si no conseguimos un dador, la salimos a comprar. Es que la Ley dice que es algo que no se puede comercializar, pero la Ley…
Hablado con el delegado de la CGT local y sindicalista de Luz y Fuerza, estaban de acuerdo con lo que se propuso, pero hasta allí llego mi amor. ¿Y qué fue? Los trabajadores afiliados a los sindicatos, se presentarían una vez por año ante el banco de sangre a donar una medida. La Ley contempla que se puede tomar medio día y le dan un café con leche. El dador tendría un carnet donde se le acreditaría tantas unidades y así tendría un ahorro. Le daría cobertura a toda su familia cuando la necesitase. Eso seria un verdadero banco solidario.
Ojala que nunca lo necesitase, pero nadie esta exento de un «tajo» de los ciruja-nos.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Río Cuart

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