¿Cesárea o parto normal? El punto de vista del bebé

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En los últimos 10 años ha aumentado considerablemente la proporción de nacimientos por cesárea.  La operación cesárea fue inventada en los tiempos del Imperio Romano como una medida heroica para salvar la vida del niño en los casos de muerte materna; de ser practicada con la madre en vida,  ella moriría irremediablemente.

Gracias al avance del conocimiento médico: introducción de la sutura, asepsia quirúrgica, anestesia, antibióticos, transfusiones sanguíneas, se transformó en una herramienta muy útil para asegurar una mejor sobrevida y salud tanto a la madre como al niño.
Sin embargo, una medida que se originó en los albores de la obstetricia como último recurso, ha pasado en la actualidad a ser en muchos casos casi tanto o más frecuente como vía del nacimiento que el parto natural. Esto sucede en todo el mundo y también en Argentina, registrándose una diferencia importante entre los hospitales públicos (con un 20 a 25% aproximadamente de cesáreas) y los sanatorios privados, donde se registran 50% o más de nacimientos por cesárea.
Las razones para que esto suceda son complejas: en primer lugar, el temor cada vez mayor a las demandas legales [mala praxis]: existe una industria del juicio por la cual un resultado neonatal adverso condiciona muchas veces demandas judiciales para el profesional.
Los tiempos y ritmos de trabajo que vive el profesional, que debe trabajar en varios centros de atención y se le hace difícil dedicar una atención personalizada a cada paciente para esperar y monitorear un trabajo de parto; una operación cesárea se planifica con mayor precisión y se ejecuta con mayor rapidez.
Existen también por parte de las mujeres una diferente concepción de su cuerpo y del dolor, por lo que a veces piensa que una cesárea constituye una forma de proteger su cuerpo, y también existe una tendencia a respetar la capacidad de decisión de las madres en cuanto a la vía del parto.
Es innegable también que en las condiciones actuales la operación no implica prácticamente mayor riesgo que un parto normal para la madre. Pero es igualmente inofensiva para el bebé?
Durante el último Congreso Argentino de Perinatología realizado durante este mes de octubre de 2007 en Buenos Aires,  se presentó un estudio realizado en el Hospital Italiano de Buenos Aires, cuyo autor principal, el Dr José María Ceriani Cernadas, demuestra que los bebes que nacieron por vía vaginal tuvieron una tasa significativamente menor de complicaciones que los bebes nacidos por cesárea.
Las complicaciones consistieron principalmente en problemas respiratorios, y los bebés afectados requirieron internaciones de 3 o 4 días en terapia intensiva neonatal. Si bien el pronóstico final fue bueno, debieron separarse de su madre y corrieron riesgos.
El estudio mencionado se realizó sobre un número importante de nacimientos (2200), en los cuales las complicaciones de los recién nacidos por cesárea casi duplicaron a las de los recién nacidos por parto natural. Una conclusión importante es que la presencia de complicaciones en el recién nacido tuvo mucha relación con la edad gestacional a la que se realizaba la cesárea. Los nacimientos por cesárea que se hizo muy próxima al término de la gestación, no presentaron mayores problemas. En cambio los que se hicieron antes del término se asociaron con complicaciones neonatales.
Existe una creencia generalizada que los embarazos llegan a término a las 37 semanas, y de allí la práctica de indicar la cesárea a partir de esa edad de embarazo. Pero existen diversos aparatos y sistemas en el bebé que aun no están totalmente maduros a esa edad, siendo el principal de ellos el aparato respiratorio.
Entonces, parece muy difícil revertir una tendencia mundial al aumento en las operaciones cesáreas, pero sí es importante recordar las palabras del autor de la investigación : “ Si la tasa de cesáreas va a seguir siendo tan alta como lo es actualmente, lo ideal es que al menos esa operación se realice cuando el bebe está más maduro.»
Esta afirmación coincide con las recomendaciones de diversas asociaciones profesionales de ginecólogos y obstetras, que recomiendan realizar la cesárea bien al término del embarazo.
Es importante que las familias y las futuras madres tengan toda la información disponible, y tengan presentes los riesgos y beneficios de ambos métodos.

Para saber más

• https://www.lanacion.com.ar/archivo/nota.asp?nota_id=953022&origen=acumulado&acumulado_id=
• https://www.scielo.cl:80/scielo.php?script=sci_isoref&pid=S0034-98871999000900014&lng=es

Dra Ingrid Waisman.
Médica pediatra
MP6508 MEsp2749

 

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