A fin de mantenernos entretenidos, nuestros padres nos contaban cuentos. Hoy solo la tele nos arrulla. Pero siguen habiendo cuentos y están de moda los chinos. No se conoce la razón, pero se dice que es porque no se cumplen jamás. Entonces los políticos, para tenernos ocupados, nos cuentan de esos cuentos. Saben que son irrealizables pero estamos tranqui y distraídos. Cuando se apiolan que nos hemos dado cuenta, nos tiran cortinas de humo. Y así nos van llevando y también robando los días de vida que es lo mas preciado que nos queda. Se creen que son eternos y están equivocados.
Hace un tiempo nos llamaron para estudiar y aportar para una reforma política. Por supuesto que casi nadie participó y se supone que es para después tener excusa de protestar. Hoy nos preguntamos ¿en qué habrá quedado eso?
Algo que deberán revisar y en forma urgente es que el pueblo no tiene por que pagar los sueldos a los secuaces de los que gano. La forma que se trabaja es fácil. Se prometen puestos públicos que vendría a ser el botín de guerra. Se saca a los anteriores y se ponen los propios. La administración publica no es para compensar pegatinas y firmar el acta de reuniones. Si adquieren compromisos con partidarios, que lo paguen de sus bolsillos. Todo se ha ido entremezclando de tal forma que se han perdido conceptos y moral. Terminemos con el repartijo de cargos y pongamos los que verdaderamente se necesitan y sirven. Y si quieren reformar algo, no consulten ya que luego o no hacen o lo que hacen es lo que quieren.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
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Río Cuarto CBA
09/11/06