La sociedad y sus reglas

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Juan Bell a través de ejemplos plantea lo que significa adaptarse a las reglas sociales.

 Cuando una persona quiere destacarse y no tiene méritos, llama la atención de diferentes maneras según su edad. Cuando chicos lloran o gritan, ya mayores transitan por las calles pelados, peludos, engominados o despeinados. Otros con aritos en orejas, boca o nariz. Otros pasan con escapes libres en autos o motos. Es la necesidad de hacerse notar. Ya grandes unos hablan gansadas y otros se visten como niños.
Pero todo en su edad y lugar. Unos para ir al bar de la esquina, lo pueden hacer de ojotas, musculosa y short. Pero en un salón de fiestas deben «uniformarse», traje y corbata. Se deja la campera y remera y se ajusta todo a un protocolo. Es algo que esta quedando obsoleto. Pero hasta que eso suceda, hay que acatarlo. Ya sea por cortesía o educación, tenemos que limitar nuestros deseos en ciertos lugares. Quien no lo hace, pasa a ser considerado ignorante. De hacerlo un ciudadano común, no hay problema, pero que lo haga quien es el representante de todos los argentinos, no esta bien. Y se aplican ciertos refranes.
«Aunque la mona se vista de seda, mona se queda» y también «No pidamos peras al olmo» Ya se ha hecho notar ¿y se conduce como grande?
Atentamente
Juan R Bell
belljuanroberto@yahoo.com.ar
Río Cuarto
04/05/06

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