Cuando la ley no nos gusta o nos perjudica, la retorcemos, la damos vuelta, la forzamos, la estiramos y la deformamos de tal manera que nos guste y nos favorezca. En esto nos ayudan los políticos y abogados. Después decimos que son unos delincuentes.
En la administración pública vemos que el mismo trabajo que se hace en la privada se necesita 6 en lugar de 2 personas. Pero es que los mejores están en las privadas dejando el resto para la pública. Y lo podemos probar y comprobar y nos sube la presión sanguínea, más allá de los pelos.
Cuando se les dio a los particulares las concesiones de los servicios públicos fue por la inercia, ignorancia e ineficiencia de los empleados del Estado. Perfecto. ¡Qué es eso de tener ñoquis en el empleo público! Entonces hoy vemos cómo se hacen las cosas correctamente. (A) Las AFJP necesitan 10 días hábiles para pasarle el dinero que la ANSES les da para los jubilados a los verdaderos dueños. ¿Eficacia o delincuencia? (B) Antes, para tener gas, había que pagar el caño que pasaba frente al domicilio. Eso no era un impuesto sino una «colaboración» para el Estado que somos todos pero no es nadie. La concesionaria de la red de gas interpretó cómo son verdaderamente las cosas. Entonces cuando se construye un edificio de 60 departamentos, el caño de la vereda se paga ¡60 veces! ¿Eficiencia o delincuencia?
¡Y otra vez quieren venir! ¿Nos creerán estúpidos? Lamentablemente debemos decir que si. Y nosotros solo pagamos.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Rio Cuarto