A mí que me importa

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Juan Bell, el ciudadano, enfoca esta vez la educación de los jóvenes y cuestiona la efectividad de lo que él llama las «fórmulas» para trasmitir modelos de conducta.

«A mí que me importa»es un dicho que se esta aplicando a los conflictos salariales. Hoy los profesores de la Universidad lo aplican. Pero ¿a quién perjudican? A los estudiantes y estos ¿qué tienen que ver? Tal vez suceda que lo que se pretende es sacar de la Uni, profesionales que luego no les hagan sombra. Se trata de que los nuevos titulados sean «Doctores o Licenciados en Mediocridad» . Pensar que el espíritu Sarmientino se ha ido. Es que todo lo espiritual ha dejado paso a lo material y los espíritus son algo totalmente etéreos. Es lo mismo que las formas de protestar. Cuando chicos se decía: «Yo quiero, yo quiero» se hacia berrinche y por no aguantar, los padres se lo daban. No había límites. Hoy se ve que esa fórmula no fue efectiva y las nuevas generaciones no tienen riendas que las sujeten. Así el «laissez faire» esta de moda. Todos expresan sus inquietudes molestando y avasallando los derechos de los demás. Hay autoridades que tal vez se hayan criado en esa cultura y lo permiten. Es la expresión popular que nos esta conduciendo al caos. ¿Y si vamos tirando de la cuerda despacito? No lo hagamos de golpe, así nos fue con el homónimo.

Atentamente
Juan R Bell
belljuanroberto@yahoo.com.ar
Río Cuarto

18/05/06

 

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