La noticia del asesinato del jeque Ahmed Yasín ha corrido como un reguero de pólvora por Gaza, y las mezquitas están siendo el punto de reunión para miles de palestinos, que disparan al aire en señal de protesta.Diario El Mundo (España) – JERUSALÉN | EL CAIRO.- La noticia del asesinato del jeque Ahmed Yasín ha corrido como un reguero de pólvora por Gaza, donde miles de personas han salido a la calle y las mezquitas están siendo el punto de reunión de miles de palestinos, que disparan al aire en señal de protesta.
La multitud también ha corrido hacia el hospital Shiffa de Gaza, donde han sido trasladados los cadáveres. Esta mañana, decenas de palestinos sacaron sus restos por las calles del centro para celebrar el rito funerario.
Los allegados de los difuntos llevaban a hombros nueve cadáveres, incluidos los escasos restos de Yasin, mientras miles de miembros de Hamas coreaban lemas de venganza por su asesinato. Tras permitir a las familias ver los cuerpos por última vez, la procesión fúnebre se dirigió para rezar a la mezquita Al-Omari, en el centro de la ciudad, antes de enterrarlos.
La creciente tensión en la zona ya se ha cobrado sus primeras víctimas mortales. En medio de las manifestaciones de condena por el ataque contra Yasín, tres personas, entre ellas un menor, han perdido la vida al ser alcanzados por disparos de soldados israelíes en Jan Yunis.
Centenares de militantes de Hamas presos en la cárcel militar israelí de Ketziot, en el desierto del Néguev, se han amotinado al enterarse del asesinato de su líder, aunque la rebelión fue controlada poco después.
Otros lugares del mundo también han sido escenario de manifestaciones. En Egipto, miles de estudiantes universitarios egipcios han protestado en las calles por el asesinato, y han quemado banderas de Israel y EEUU, país acusado en el mundo árabe de parcialidad a favor del Estado judío.
Las protestas se registraron en varias universidades egipcias, entre ellas las de El Cairo y Ain Shams, pero las fuerzas de seguridad no permitieron a los jóvenes salir a las calles.
Los manifestantes corearon eslóganes y enarbolaron pancartas en las que se condenaba al primer ministro israelí, Ariel Sharon, y se elogiaba al «mártir Ahmed Yasín».
Protestas similares tuvieron lugar en Yemen, mientras que en Bagdad, Beirut y Amán miles de manifestantes salieron a las calles para manifestarse contra Israel.